​El 11 de agosto de 1857, mediante Real Orden se creó el Fondo de Remonta, donde se establecieron las normas para ayudar en el desembolso económico que los Guardias Civiles tendría que asumir ante la pérdida de caballos por accidentes o enfermedades.

​En un primer momento, este fondo se nutría del dinero que aportaban los Guardias Civiles de Caballería– al inicio sólo existían caballería e infantería- y de cantidades adelantadas por el Gobierno; todo ello con la finalidad de garantizar que se dispusiera de caballos adecuados y que solamente fueran utilizados para el servicio relacionado con la Guardia Civil.

​Cuando se ingresaba en la Institución, aquellos destinados en Caballería recibían además de su uniforme, un caballo y una montura, pasando a ser de su propiedad, descontándole de su sueldo una cantidad mensual hasta que se cubría el pago total; si se causaba baja en el Cuerpo, podrían quedarse con el animal o con su valor si habían prestado unos determinados años de servicio. En caso de fallecimiento del animal, si se demostraba que había sido en acto de servicio o por accidente se le entregaba otro caballo, si la causa era por negligencia del jinete, el valor del animal se le restaría de su salario.

​A día de hoy, la Guardia Civil cuenta con El Escuadrón de Caballería (ESCON), fundado en 1958 y con sede en el Colegio de Guardias Jóvenes  Duque de Ahumada de Valdemoro. Está encuadrado en la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS), que a su vez pertenece a la Jefatura de Unidades Especiales y de Reserva (JUER).

​Es la Unidad montada especialmente preparada para el cumplimiento de los cometidos asignados a la ARS que se ajuste a sus peculiares medios y formas de acción.  Para acceder al mismo se habrá de superar el Curso Ecuestre, que se realiza en dos fases, una en el CAE (Centro de Adiestramientos Especiales de Logroño) y la otra en el propio Escuadrón de Caballería (deberán demostrar entre otros aspectos conocimientos en hipología,  cuidado y mantenimiento del caballo, doma clásica…); además de ello, han de acreditar de forma permanente la aptitud física, psíquica y técnica que establezca la ARS.

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​Al pertenecer a la ARS (como principal Unidad de Reserva de la Guardia Civil), podrán ser empleados en numerosos cometidos, especialmente en aquellos relacionados con el Orden Público por lo que dispone de formación en Control de Masas. Suelen participar en dispositivos en los que se prevé una gran afluencia de personas para participar en la protección, mantenimiento y en su caso restablecimiento del orden público (eventos deportivos), se activan para realizar labores de Seguridad Ciudadana en apoyo de otras Unidades y ante cualquier evento en los que se haga necesaria su presencia (Camino de Santiago, prevención de Incendios Forestales….)

​Además de ello, participan como Unidad de honores y protocolo de los actos de especial relevancia.

Fuente de la fotografía: Guardia Civil

Más info sobre Guardia Civil: Academia Nacional – Guardia Civil